10 consejos para unas buenas vacaciones de verano

Mark Arnold
Mark dirige el programa pionero del ministerio de necesidades adicionales de Urban Saints y es cofundador de la "Alianza de Necesidades Adicionales", ...

Susúrralo muy bajito, pero tal vez, sólo tal vez, ¡sea posible tener vacaciones este año!
Después de más de dos años de restricciones, cierres, listas rojas, cancelaciones y reprogramaciones, este verano podría ser el de la "normalidad" vacacional.
Así pues, ¿qué debemos hacer para preparar a nuestros niños y jóvenes con necesidades especiales para las próximas vacaciones, ya sean en el extranjero, en el Reino Unido o, como sigue siendo el caso para algunos de nosotros, unas vacaciones en casa?
1. No lo dejes para el último momento: deja tiempo para la tramitación
Aunque el atractivo de las ofertas de vacaciones tardías puede ser tentador, dejar para última hora la decisión de si ir o no y dónde hacerlo puede resultar realmente difícil para los niños y jóvenes, que necesitan tiempo de procesamiento para prepararse ante un cambio significativo. Planifique con tanta antelación como pueda.
2. Haz un "viaje" mental a través de las vacaciones: enumera los posibles problemas
Piensa en todo, desde el equipaje, el viaje, dónde te vas a alojar y dormir, las cosas que vas a hacer en vacaciones, las personas que te acompañarán y las que conocerás, la comida que vas a ingerir, todo. ¿Cuáles van a ser los posibles problemas de tu hijo o joven con necesidades especiales? Enuméralos y empieza a pensar en cómo reducir el impacto de cada uno de ellos. Por ejemplo, si la comida va a ser un problema, ¿podrías ponerte en contacto con el proveedor de las vacaciones y solicitar un menú especial? ¿O podrías llevarte alguna de tus comidas favoritas?
3. Crear una "historia social" para las vacaciones
Un "relato social" es una hoja en la que se utilizan fotos, símbolos y palabras para explicar algo nuevo o complejo a un niño o joven con necesidades adicionales. Puedes crear una para las vacaciones en la que describas todas las cosas que tu hijo o joven necesita saber, dándole las herramientas para entender cómo serán las vacaciones.
Puede encontrar más información sobre historias sociales en el sitio web de Reachout ASC: https://reachoutasc.com/resources/downloadable-resources/
4. Crear un "calendario visual
Elabora un plan para cada día, utilizando símbolos o fotos que representen cada aspecto de ese día para tu hijo o joven. Si es posible, pon una foto suya en un velcro que puedan mover por el horario a medida que avanza el día. Les ayudará a saber qué pasa ahora, después, etc. En el sitio web de Reachout ASC, arriba, hay un ejemplo de plantilla de horario visual: "Nuestro día en casa".
5. Coge tus cosas favoritas
¿Qué juguetes u objetos favoritos utiliza tu hijo o joven para sentirse seguro? Asegúrate de que no se te olvidan, pero mételos en el equipaje de mano, ¡no querrás que se pierdan! Por ejemplo, si vas a Cornualles, puedes comprar una foca de juguete para cuando visites el Santuario de Focas de Gweek. La foca de juguete podría ser su "mascota de vacaciones" y su hijo podría encargarse de cuidarla.
6. Hacer un "simulacro" y comprobar la asistencia especial
Si vas a volar, y si el aeropuerto al que vas no está demasiado lejos, podrías hacer un viaje sólo para verlo, para echar un vistazo a dónde está todo. La mayoría de los aeropuertos cuentan con asistencia especial para las familias que viajan con un niño o joven con necesidades adicionales, así que valdría la pena explorar qué se les puede proporcionar. Muchas compañías aéreas también ofrecen ayuda, pero conviene solicitarla con antelación.
7. Tener cosas que hacer
Tanto si viaja en avión como en tren o en coche, habrá largos periodos sin nada que hacer. Lleve un paquete de actividades que pueda sacar para llenar esos huecos. Dependiendo de tu hijo, puede ser algo para colorear, un libro para mirar, algún juguete inquieto para usar, algún Lego, o algo en su tableta para ver o escuchar, lo que sea que le ayude a llenar el tiempo y no aburrirse.
8. Recuerde los tentempiés, las bebidas, la medicación, el equipo esencial...
Solemos acordarnos de las cosas importantes, como billetes, pasaporte, dinero, teléfonos, etc., pero haz una lista de qué más vas a necesitar. ¿Necesita llevar medicación? ¿Tienes suficientes o tienes que pedir que te repitan la receta con mucha antelación? No confíes en poder parar en algún sitio por el camino, podrías encontrarte en un atasco enorme justo en el momento en que alguien te comunica que tiene sed o hambre.
9. Trabaje con su hijo o joven, pregúntele
No hagas todas estas cosas tú solo; si es posible, implica a tu hijo o joven. Pide su opinión: ¿qué cosas les preocupan? ¿Qué quieren que les acompañe para sentirse seguros? ¿Qué recursos les ayudarán a sentir que controlan lo que ocurre? Cuanto más habléis de las vacaciones y trabajéis juntos para superar los miedos, más probabilidades tendréis de que el viaje sea un éxito. Volvemos al "tiempo de procesamiento" que mencionaba en el consejo 1.
10. Y por último... ¡no pasa nada si te vas de vacaciones!
Si todo parece demasiado desalentador, demasiado complicado para usted y su hijo o joven con necesidades especiales, si las complejidades de intentar pasar las vacaciones en otro lugar son demasiado grandes, no se hagan pasar por una pesadilla, ¡váyanse de vacaciones!
Algunos de los consejos anteriores seguirán siendo válidos si te quedas en casa pero sales de excursión, y todos podréis pasarlo estupendamente alojándoos en la zona y explorando lo que allí se ofrece. Y cada uno dormirá en su cama cada noche.
Sea lo que sea lo que quieras hacer este verano, espero que estos 10 consejos te sirvan para recordar algunas cosas que todos podemos hacer para que las vacaciones de verano sean un poco menos estresantes y un poco más divertidas. ¡Pásalo en grande!