Back to blog archive

Querido cuidador, querido amigo

Emily Sutton por Emily Sutton Necesidades adicionales

Emily Sutton

Emily Sutton

Me inicié en el mundo de las necesidades especiales en Nochevieja de 2012, con el nacimiento de mi hijo Jenson. Es fabuloso, ágil y cariñoso, y ha red...

Querido cuidador, querido amigo

Me dijeron que cumplía los requisitos para recibir ayuda de la asistencia social. Lo llamaron "respiro". Me ingresaron dinero en una cuenta y me dijeron que buscara "personal".

No quería personal. No quería extraños en mi casa. Quería curar a mi hijo, pero nadie me ayudaba a hacerlo. Estaba perdida, desesperada.

Entraste en nuestra casa y en nuestras vidas aquel día, y nunca te has ido.

No te diste cuenta cuando la casa estaba hecha un desastre. No te importaba cuando aún estaba en pijama. Hablabas y escuchabas, observabas y aprendías. A veces seguías las instrucciones incluso antes de que salieran de mi boca. Absorbías como una esponja.

Nada le resulta raro o inusual, no se inmuta cuando la cena cae sobre su regazo, le tiran juguetes y le revuelven el pelo. Cuando está en su peor momento aún pareces encontrar lo mejor de él. Eres tan paciente y amable, pero a la vez tan firme y centrada. Eres tranquila, organizada y proactiva; todo lo que yo quiero ser.

Aportas experiencia, pero también amplitud de miras. Tomas la dirección pero también me diriges.

Preguntas por MÍ. Te preocupas y escuchas. Me preparas té y haces que me siente y me lo beba. Eres sensible y comprensivo, pero no paternalista ni sentencioso.

Tenemos días buenos y días malos. Aprendemos juntos. Reflexionamos sobre los días pasados y nos sentimos colectivamente orgullosos de lo que hemos conseguido. Me has visto en mis peores momentos y en los mejores. Tú sacas lo mejor de mí. Me enseñas que está bien ser yo misma y me aseguras que estoy haciendo un buen trabajo.

Con el tiempo has compartido tus propias historias, y con el tiempo nos hemos hecho amigos. Me has hecho confidencias, has celebrado y llorado conmigo. He visto cómo cambiaban y evolucionaban tu carrera y tu vida familiar. Cuando la vida ha sido cruel y has estado en lo más bajo, de alguna manera encuentras fuerza en él y eso desvía tu dolor.

Cuando ha pasado por momentos bajos y de verdadera dificultad, nos has unido a todos.

He sido un desastre destrozado y tú has sido la torre de fortaleza. Te he visto disfrutar de él y al hacerlo he recordado cómo disfrutar yo también.

¡Le has hecho muy gracioso! Me cuenta los chistes que ha aprendido y repite las palabras traviesas y las acciones tontas. Tienes tus propios chistes y frases y le encanta que tengas secretos.

Has sido valiente. Cuando tenía tanto miedo de salir de casa, me mostraste resiliencia.

No vacilaste ante las miradas y las miradas, no te preocupaste por los posibles obstáculos. Tu principal objetivo siempre ha sido darle todo lo que quiere y lo que necesita, con una brillante actitud de "que le den al resto del mundo". Me has enseñado a tener la piel más gruesa.

Dijeron, no emplees amigos. Dijeron, eres su gerente, no su compañero.

Me dijeron que diera instrucciones claras y mantuviera los límites. Redacta contratos. Sigo olvidando que estás aquí para que te paguen; me haces sentir que estás aquí por elección y no por un ingreso.

Se repite tu nombre cuando estás a punto de llegar, y él te observa y espera con emoción.

La casa se siente sola cuando os vais y a menudo os marcháis tarde porque estáis muy absortos el uno en el otro.

Has sido su terapeuta, su taxi, su profesor y su defensor. Y has sido su mejor amigo.

Mi hijo es mejor persona por conocerte.

Temas

Otros artículos de su interés ...

No se han encontrado resultados