Necesidades especiales de los padres: Vivir con ansiedad

Las citas con mi hijo estos días siempre conducen al pavor y, en última instancia, a la ansiedad.

No sólo dentro de mí, sino que él también sufre la ansiedad.

Con sólo siete años, ya se acobarda y teme la mención de tener una cita con el médico.

A veces miro atrás y desearía que las cosas fueran como cuando él era un bebé. Tan inocente. Tan inconsciente de lo que estaba por venir, aunque las pruebas y los procedimientos fueran beneficiosos para él.

Sólo puedes mantenerlos desprevenidos durante un tiempo.

Procedimientos tan sencillos como una limpieza dental rutinaria se han convertido en algo que requiere anestesia.

Sin algo que le calme los nervios, o que le anestesie, mi hijo llora, tiene arcadas e incluso vomita ante el intento de mirarle la boca.

¿Y lo más difícil? Todo esto no facilita ninguna cita futura.

Por mucho que intente explicarle que esta vez no duele, que esto es súper rápido si cooperamos; siempre acabamos saliendo con más cicatrices encima de las que ya tiene formadas en su memoria.

Tiene siete años y veo que se preocupa por cualquier cosa. Hay alguna forma de sobrellevarlo sin medicación?

¿Sin añadir otra pastillita a su siempre creciente colección?

Todavía no he hablado con un médico al respecto, ya que estoy intentando aprender y trabajarlo yo misma con él.

No fue hasta mi edad adulta temprana cuando supe que vivía con ansiedad. Elegí la vía de la medicación.

Pero no ha sido un proceso fácil.

Tengo edad suficiente para saber que ciertas cosas no son como deberían ser, y soy capaz de comunicárselo con éxito a mi médico.

Podemos trabajar juntos para cambiar o alterar la medicación y encontrar la más adecuada.

Pero cuando tienes siete años, tu capacidad para hacerlo disminuye drásticamente.

Por ahora, debemos encontrar la manera de sobrellevarlo y aprender juntos. La vida es siempre un proceso de aprendizaje.

Pero al tener un hijo con necesidades especiales, normalmente nos vemos obligados a encontrar formas de eludir la "norma".

Encontrar lo que nos funciona, y seguir a tope con ello hasta que deje de funcionar.

Luego volvemos a los bloques de construcción y empezamos de nuevo.

Vivir con ansiedad no es algo que quiera incapacitar a mi hijo para vivir una vida plena.

Pero en un mundo en el que cada día hay algo de lo que preocuparse, ¿cómo podemos superarlo?